Se trataba de una fiesta privada que organizó el gurú de las inversiones, Charles Brandes
No sabemos cómo irán las ventas de su último álbum Bionicdespués de su recién estrenado single You lost me, pero la actriz de Burlesque también tendrá facturas que pagar y lo mejor que podía hacer era buscar medios alternativos.
Por eso, mientras todos disfrutamos de la noche más terrorífica del año, Christina Aguilera decidió trabajar en San Diego durante la fiesta privada que organizaba el gurú de las inversiones, Charles Brandes. La cantante se reembolsó la suma de un millón de dólares, todo esto sin incluir el maquillaje, el traslado y algunos requisitos más que la cantante había puesto como condiciones de pago. Sin embargo, fuentes cercanas a Brandes afirman que Aguilera sólo cobró la mitad de la cifra inicial.
A pesar de todo, la cantante ha manifestado que aún no se siente con éxito suficiente: “Todavía me quedan muchas cosas por hacer. Soy perfeccionista, me gustaría hacer más películas y aún no he alcanzado el éxito que anhelo. Sé que cuando logre todo lo que me propongo alcanzaré la paz”, explica la artista.